EL SOL

La estrella central de nuestro Sistema Solar.

El Sol es la estrella central de nuestro Sistema Solar. Es del tipo espectral G2, esto es, de un color amarillo-blanquecino, producto de una temperatura superficial de entre 5000 y 6000° K.

A una distancia media de la Tierra de unos 149.600.000 de kilómetros, su luz se demora 8,19 minutos en llegar a la superficie de nuestro planeta.

Contiene el 99,85% de toda la masa del Sistema Solar. Formado hace unos 4.650 millones de años, le restan unos 5.000 millones de años de vida, hasta finalmente expulsar gran parte de su masa en una nebulosa planetaria, quedando su núcleo convertido en una enana blanca.

Como toda estrella, emite energía en todo el espectro electromagnético, desde las ondas de Radio (longitudes de onda más largas, de menor frecuencia y con menos energía) hasta los rayos Gamma (longitudes de onda más cortas, de mayor frecuencia y con más energía).

Su estructura interna está configurada en diferentes capas, las cuales se describen a continuación:

A.- Zona Interior.

  1. Núcleo. Abarca aproximadamente un cuarto del radio solar. La temperatura en su centro alcanza alrededor de los 15.000.000 °K y el plasma (gas ionizado) que lo constituye, está sometido a altísimas presiones. Estas condiciones provocan la transformación de hidrógeno en helio, a través de procesos de fusión nuclear.
  2. Zona Radiante. Esta región abarca entre 0,25 y 0,7 del radio del Sol y en ella la energía generada en el núcleo se transmite hacia las partes altas de esta zona por radiación, esto es, los fotones son absorbidos y emitidos en forma continua en distintas direcciones, antes de pasar a la siguiente capa. Los fotones pueden demorar hasta cien mil años en alcanzar la Zona Convectiva.
  3. Zona Convectiva. En esta zona, que abarca desde 0,7 radios solares hasta la Fotósfera, la energía proveniente de la Zona Radiante se transmite hacia la superficie del Sol por convección, esto es, grandes masas de gas caliente trasladan esta energía hacia la Fotósfera, produciéndose así un enfriamiento de los gases, los cuales vuelven a descender al interior del Sol.

B.-Fotósfera. Corresponde a la superficie solar y es la encargada de trasmitir la energía al exterior. Está compuesta por una masa de gránulos brillantes producidos por las masas de gas caliente ascendentes que provienen de la Zona Convectiva. Tiene unos 400 km de espesor y una temperatura de cerca de 6.000 °K. En ella se produce el fenómeno de las manchas solares, que corresponden a zonas con un intenso campo magnético y de menor temperatura (unos 4.800 °K) y que se observan oscuras por contraste con el resto de la fotósfera.

3.-Atmósfera.
Cromósfera. Se extiende unos 10.000 km por sobre la Fotósfera, con temperaturas mucho más altas que las de esta última capa. En esta zona se pueden observar fenómenos como espículas, protuberancias y filamentos.
Corona. Consiste en una extensa zona de muy baja densidad, compuesta de plasma que puede alcanzar temperaturas de hasta 10.000.000 °K, lo que provoca que esta zona sea una alta emisora de Rayos X. Visible durante los eclipses solares.

Finalmente está la Heliósfera, región creada por influencia del viento solar y que se extiende a más de 100 UA del Sol.

 

Diámetro ecuatorial: 1.392.000 km

Masa: 332.946 veces la de la Tierra

Gravedad superficial: 274 m/s2 (27,9 g)

Período de rotación (ecuador): 27 días 6 horas 36 minutos

Inclinación axial (respecto del plano galáctico): 67,23°

Composición de la fotósfera: 73,46% de Hidrógeno; 24,85% de Helio; 0,77% de Oxígeno; 0,29% de Carbono; 0,16% de Hierro; 0,12% de Neón; 0,09% de Nitrógeno; 0,07% de Silicio; 0,05% de Magnesio; 0,09% de Azufre.